lunes, 12 de noviembre de 2012

Matar al marido (Li Ang)



Ficha técnica 
Título: Matar al marido
Título Original: Sha Fu
Autor: Li Ang
Traducción: Bernardo Moreno Carrillo
Editorial: Chindia (Plataforma Editorial)
 Nº de páginas: 180
ISBN:  9788415577454
Año: 1983
1ª Edición: Septiembre, 2012

Sinopsis

La joven Lin Shi es obligada a casarse con un carnicero sádico. Brutalizada por este, se ve abocada a la locura y, finalmente, al homicidio. Basada en un hecho real ocurrido en Shanghái durante la década de 1930, Matar al marido obtuvo el prestigioso premio United Daily News tras su primera publicación en Taiwán en 1983, suscitando al mismo tiempo un gran revuelo por su descarnado retrato de la violencia sexual y de la crueldad emocional.

La novela que causó el mayor escándalo de la historia literaria de Taiwán y que convirtió a su autora en la más respetada y traducida de su país. Un texto contundente y comprometido que se lee con tanto asombro como interés.

Opinión
Reseña hecha para la web Anika entre Libros (publicada la semana del 29 de octubre al 4 de noviembre de 2012).

Lin Shi tiene que casarse con un carnicero por imposición de su tío. Si antes su vida era dramática, el mismo día de la boda descubrirá lo que es vivir en constante terror, sometida continuamente a los caprichos de su excéntrico esposo.
Li Ang nos ofrece una historia dramática llena de sufrimiento y dolor, que consigue ponernos los pelos de punta.
 
En el prólogo, la autora nos comenta que la novela está basada en hechos reales; concretamente el asesinato perpetrado por la mujer. También nos advierte que para mayor facilidad decide trasladar los hechos a su ciudad natal, Lugang, por estar más familiarizada con el entorno. No sé como quedaría al historia si la hubiese situado en Shanghái, pues se podría extrapolar en muchos aspectos a casi cualquier lugar del mundo, pero desde luego, tal como está, es una narración maravillosa.
 
Desde el principio conocemos cuál va a ser el final de esta turbulenta obra; por lo que solo nos resta conocer el motivo, que es lo que nos ofrece la autora.
 
A medida que vamos leyendo, vemos que el motivo es bastante obvio, ¿quién sería capaz de aguantar tantas violaciones, humillaciones y malos tratos sin volverse loco? Y es que la autora hace mucho hincapié en los malos tratos sufridos por la protagonista y en la vida, sin sentido, que llevaba.
 
Li Ang aprovecha también para contarnos parte de las costumbres de su país, unas costumbres que ahogan a la mujer que tiene que vivir supedita eternamente a la familia o al marido. Unas costumbres que son capaces de afirmar que si una mujer mata a su marido es porque tiene un amante; nadie es capaz de ver más allá aunque esté sufriendo lo mismo.
 
Es una lectura adictiva, pues desde el comienzo es fácil engancharse para acompañar a Lin Shi en sus desdichas y averiguar cuándo llegará el momento tan temido en que tomará la drástica decisión de poner fin a su calvario personal.
 
Es una novela sencilla, fácil de leer y muy amena. No puedo decir que gustará, puesto que llegaremos a sentir repulsión por Chen, el marido de Lin Shi, y gran parte de la historia, pero sí creo que dejará una profunda huella en quienes la lean. Lo que sí es seguro es que es una novela que emocionará y que conseguirá que nos replanteemos nuestras vivencias cotidianas.
 
Un muy buen comienzo, para el nuevo sello Chindia Editorial de Plataforma Editorial. Como todas las novelas que nos oferten tengan esta calidad le auguro un maravilloso porvenir en el complicado mundo de la literatura.


Fuentes
Portada y sinopsis de la página web de Editorial Chindia.
Reseña hecha para la web Anika entre Libros.

4 comentarios:

  1. Pues no me sonaba de nada este libro. No tiene mala pinta así que me lo apuntaré, pero con lo larga que es ya la lista...
    Besotes!!!

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  2. Lo tengo en casa, a ver si lo leo pronto. Yo creo que me gustará.

    bsos!

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  3. Acabo de terminarlo y reconozco que ha sido una lectura intensa,por todo los sufrimientos, pero no podía parar de leer, me ha durado dos ratos. Comparto totalmente tu opinión.

    Besos

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