Título: El extraño proceso a Avinia Sánchez Cordelejo
Autor: Miguel Puche Gutiérrez
Editorial: Ediciones Dauro
Editorial: Ediciones Dauro
Nº de páginas: 264
ISBN: 9788496677487
Año: 2012
ISBN: 9788496677487
Año: 2012
1ª Edición: Mayo, 2012
Colección: Sangre
Colección: Sangre
Sinopsis
Un acontecimiento dramático de escala desmedida y alcance internacional,
en cuanto a la sensibilización de la opinión pública se refiere, ocurre
en una aciaga noche en la que mueren, degollados, un número ingente de
personas y animales de pastoreo. Ante la evidencia de encontrar solo
viva a una señora añosa en el lugar de los hechos, se le imputa el
flagrante delito. Toda la narración transcurre sobre el proceso judicial
que se le hace a la anciana con un delirante discurrir de personajes y
planteamientos que hacen fundir la razón con la sinrazón.
Se muestra la parte más íntima del alma de los protagonistas. Desde el encumbrado fiscal al gris abogado defensor, pasando, como no, por la rea, Avinia, y el resto que componen el jurado. No podemos dejar atrás al jefe de los custodios y a su esposa, quienes adquieren, también, gran parte del protagonismo.
El lector vivirá momentos hilarantes junto a la consternación que provocan esas mismas u otras situaciones en las que invita a hacer introspección.
Opinión
Reseña hecha para la web Anika entre Libros (publicada la semana del 8 al 14 de octubre de 2012).
Se
está celebrando el juicio contra Avinia Sánchez Cordelejo. Se le acusa
de haber matado a más de sesenta mil personas de diversos ayuntamientos
en una sola noche.
Avinia tiene en contra a los medios de comunicación y a la opinión pública en general. La prueba de cargo es haber estado presente en el lugar de los hechos y estar viva. Su defensa es simple: tiene ochenta años.
Avinia tiene en contra a los medios de comunicación y a la opinión pública en general. La prueba de cargo es haber estado presente en el lugar de los hechos y estar viva. Su defensa es simple: tiene ochenta años.
Miguel Puche
nos ofrece una parodia de la sociedad en que vivimos ambientada en el marco de la justicia.
Desde la primera línea de la novela nos damos cuenta de que no se trata de una historia al uso que, al principio, nos dejará perplejos pero a medida que vamos avanzando nos introducimos en un universo de desatinos, en el que jueces, abogados, y guardias mediocres aparecen en situaciones hilarantes.
Uno de los problemas que surgen en la lectura es ubicarla en un marco temporal correcto. En múltiples ocasiones podríamos deducir que estaríamos en la década de los 80, en la que todavían perduran los restos de la dictadura, pero en otras nos decantamos por una época más actual, sobre todo por la mención de un programa como “Gran Hermano”, el cual aún sigue chocando. De todas formas, esto puede deberse a que la vida en los pueblos todavía no ha cambiado mucho.
En cuanto al autor nos da a conocer los hechos que se le imputan a Avinia uno ya se da cuenta de que hay algo que no encaja. Y es que aunque el juez, el fiscal y todo el pueblo crean a pies juntillas que Avinia es la responsable de la muerte de sesenta y dos mil personas, es algo más que improbable debido a la edad y la condición física de la acusada. Pero este hecho que es tan relevante para el lector, parece no serlo para nuestros protagonistas que están gravemente influídos por los medios de comunicación.
El ostentoso fiscal está dispuesto a demostrar, si es que el término demostrar se puede aplicar a lo que él hace, que Avinia es verdaderamente culpable de los hechos. Imbuído en su propio poder y en su seguro éxito aparecerá en el juicio de las formas más variopintas.
El abogado defensor es un muchacho al que le ha caído el caso como una losa. Convencido, como todos, de que Avinia es culpable pasará por el juicio como un mero trámite, pero la vida da muchas vueltas.
El jurado está formado por un elenco de personas variopinto. Desde peluqueras, amas de casa y médicos, incluyendo a un marroquí, el cual parece más ilustrado que el resto de sus compañeros juntos.
Marcelo, uno de los guardias, se considera indispensable. Un poco fanfarrón, será el que viva una de las situaciones más desternillantes de toda la novela.
Por último, podríamos hablar de Avinia, pero se trata de un personaje que será mejor que descubra el lector.
Desde la primera línea de la novela nos damos cuenta de que no se trata de una historia al uso que, al principio, nos dejará perplejos pero a medida que vamos avanzando nos introducimos en un universo de desatinos, en el que jueces, abogados, y guardias mediocres aparecen en situaciones hilarantes.
Uno de los problemas que surgen en la lectura es ubicarla en un marco temporal correcto. En múltiples ocasiones podríamos deducir que estaríamos en la década de los 80, en la que todavían perduran los restos de la dictadura, pero en otras nos decantamos por una época más actual, sobre todo por la mención de un programa como “Gran Hermano”, el cual aún sigue chocando. De todas formas, esto puede deberse a que la vida en los pueblos todavía no ha cambiado mucho.
En cuanto al autor nos da a conocer los hechos que se le imputan a Avinia uno ya se da cuenta de que hay algo que no encaja. Y es que aunque el juez, el fiscal y todo el pueblo crean a pies juntillas que Avinia es la responsable de la muerte de sesenta y dos mil personas, es algo más que improbable debido a la edad y la condición física de la acusada. Pero este hecho que es tan relevante para el lector, parece no serlo para nuestros protagonistas que están gravemente influídos por los medios de comunicación.
El ostentoso fiscal está dispuesto a demostrar, si es que el término demostrar se puede aplicar a lo que él hace, que Avinia es verdaderamente culpable de los hechos. Imbuído en su propio poder y en su seguro éxito aparecerá en el juicio de las formas más variopintas.
El abogado defensor es un muchacho al que le ha caído el caso como una losa. Convencido, como todos, de que Avinia es culpable pasará por el juicio como un mero trámite, pero la vida da muchas vueltas.
El jurado está formado por un elenco de personas variopinto. Desde peluqueras, amas de casa y médicos, incluyendo a un marroquí, el cual parece más ilustrado que el resto de sus compañeros juntos.
Marcelo, uno de los guardias, se considera indispensable. Un poco fanfarrón, será el que viva una de las situaciones más desternillantes de toda la novela.
Por último, podríamos hablar de Avinia, pero se trata de un personaje que será mejor que descubra el lector.
Resumiendo, Miguel Puche
nos presenta una obra que podemos calificar de cómica, pero que, sin
embargo, nos muestra cómo es nuestra sociedad en realidad. Una sociedad
que se deja influír por los medios de comunicación, que desdeña a los
que no son sus iguales sin darles una oportunidad. Ser diferente en un
mundo de blancos, guapos y listos se paga y, a veces, no nos damos
cuenta de hasta qué punto.
Fuentes
Portada y sinopsis de la página web de Ediciones Dauro.
Reseña hecha para la web Anika entre Libros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario